domingo, 22 de septiembre de 2013

No podría ser de otra forma

Damos completo sentido al nombre del Blog. No es que no haya nada que decir... sino que no lo queremos decir.

En  mi caso para dejar que todo aquello que debería ser dicho no esté presente, porque el día a día sería más duro para afrontar. O quizás porque a oídos necios palabras sordas.

Breve, pero menos da una piedra.

viernes, 14 de diciembre de 2012

El mundo laboral y mi mundo

No sé ni cuánto tiempo llevo sin escribir... y no por nada en especial, simplemente no tenía ni tengo nada que decir. Pero como tú dirías, por eso es un antiblog.

He puesto ese título para obligarme a hablar sobre algo, pero veamos qué sale.

Yo no entiendo a ciertas personas, a mí que me lo expliquen. Dime tú cómo es posible la vida de esta persona (?¿) que te voy a resumir: un año más que nosotras, una ingeniería, dos máster, perfecto inglés y francés, un año en Alemania y medio en Suecia, vive con su novio con el que lleva seis años, coche, carnet, bastante experiencia laboral de todo tipo, gimnasio todos los días, perfectamente arreglada (ropa, pelo, maquillaje) todos los días, tiempo para salir de fiesta  noches enteras, para pasear a su perro, para viajar a prácticamente cualquier rincón del mundo cada dos por tres... ¿me lo explicas Nana? ¡¿ME LO EXPLICAS?!. Pues gente así, un montón te vas a encontrar. Horrible. Me amargan la vida. (No).

Mi mundo y el mundo laboral como que no... ¡leches! ¡si ni siquiera sé de qué trabajo! ¡no sé de qué es la empresa! Me dicen que qué hago y no sé contestar... es todo muy confuso. Esto te lo contaré detenidamente y en privado, o lo intentaré.

Yo sólo sé que madrugo, que me siento en el metro una hora y me duermo hasta que suena mi alarma a la que he puesto de melodía "Paco, Paco, Paco" de Encarnita Polo y la foto del Ecce Homo y de título "metro party". Después llego allí y hago una serie de "cosas" ?¿ y al final de mes me dan un dinero para comprar barbies. Eso es todo lo que puedo contar.

Ya me contarás tú qué haces... o mejor no, no hablemos de cosas desagradables que no es bueno para el cutis.

¿Cuándo va a llegar nuestro momento amiga? Siento como que siempre estamos esperando algo y que lejos de acercarnos nos alejamos. Siento que vivimos en un continuo quiero y no puedo, en un constante quiero y no sé cómo hacerlo. Quiero ser joven, Nana, quiero ser como "Across the universe", quiero perder la noción del tiempo, caminar cinco centímetros sobre el suelo, sentir la sangre por debajo de la piel.

Yo me amarré más al suelo hace dos meses y ahora lo harás tú, ¿por qué motivo?. Cada día nos intentamos convencer de qué eso es lo que tenemos que hacer. Sé que tú lo haces porque yo lo hago, y por eso sé igualmente que te has dicho mil veces que tú también querías encontrar un trabajo. ¿A quién pretendemos engañar?.

Vaya, creo que de repente ha cambiado el tono de mi entrada y ha pasado a ser algo que debería escribir en un mensaje privado. Volveré a la frivolidad en el siguiente párrafo, disculpa.

 Menos mal que ahora somos felices porque tenemos entradas para conciertos y porque vamos a ir a Londres y a Disneyland. Realmente siempre somos felices, solo que ambas sabemos que el rollo dramático de párpados entreabiertos y mirada perdida siempre queda bien con un filtro vintage de Instagram.


Te dejo querida mía, voy a encender el árbol. Ah, que se me había olvidado decir que es Navidad y que eso es muy bonito porque nace el Niño Jesús.

Bendiciones y buenas noches.

martes, 6 de noviembre de 2012

Realidad

Quizás ya ni me leas. Quizás, ahora, estés en otro plano al que yo me encuentro. Quizás, como otras muchas veces todo acabe aquí. Quizás, no podamos elegir hacernos adultos, sino que obligatoriamente caemos en ese estado. 

Hoy he llorado. Y mucho. Menos mal que a veces el waterproof es de verdad, porque sino, todo hubiera sido más dramático. Quiero desengancharme de la realidad. Hoy no quiero criticar. Hoy no quiero ser mordaz, ni pseudointelectual. Hoy sólo quiero ver mi mierda plasmada en Internet. Para siempre, porque en el fondo siempre la llevaré conmigo. Estoy podrida por dentro y lo peor es que me lo he creado yo sola. Siempre acuso a mis circunstancias y mi pasado, pero es una mentira que nos decimos todos para contentarnos. Para sentirnos más normales. Es todo lo que tengo que decir. No hay conclusiones. Sólo la verdad. Una realidad. Una tautología, pues todo el mundo lo sabe y aún así, no nos aporta nada nuevo.

martes, 16 de octubre de 2012

Añicos

Me han dicho que estoy un poco emo y puede ser, pero de verdad hermana, pienso que hoy me lo merezco, y voy más allá, hoy nos lo merecemos.

Estoy viendo como nuestra vida tal y como la queríamos ha acabado sin ni siquiera haber empezado. ¿Nos queda consuelo alguno? Bueno... al menos tú serás rica, yo sigo endeudándome. No entiendo la lógica paterna: "Tienes que hacer algo con tu vida y buscarte un trabajo para costearte la vida, así que métete a un máster que te absorbe y desembolsa 1500€ y así empezarás a ser una persona de provecho". No, sigo sin entenderlo. Y además, me ponen problemas con la matrícula y todo, ¿lo entendemos? Otra respuesta negativa.

Reclamos nuestro derecho de quejarnos y llorar cuando todo a nuestro alrededor se rompe y estalla. Y a quién no le guste... patada en las partes que aquí no puedo nombrar.

¿Sabes dónde quiero estar ahora? En el McDonald's molón de Alcorcón, en ese que tampoco nos contratarían. Quiero tomar helado, estar sentada, estar contigo. Porque por mucho helado o batido que hubiera sino estuvieras ahí no tendría sentido. Porque juntas a pesar de la desesperación sabemos reírnos de nuestra desgracia y de nuestros arranques emo. Cuando estamos juntas my darling, me he dado cuenta de que somos un poquito más valientes, de que todo nos asusta menos, aunque digamos que es lo que más nos acojona.

Porque juntas, un  cristal roto puede ser un multiespejo en el que retocarnos el rimmel.

domingo, 7 de octubre de 2012

Domingo de reflexión

Sí, lo sé, esta vez he pasado mucho tiempo sin escribir, pero es que no tenía que decir nada importante (entendiendo "importante" como "importante para nosotras y absurdo para todos los demás). Y no, hoy tampoco tengo nada que decir, pero es uno de esos domingos en los que me propongo hacer cosas que voy dejando y dejando...

Y al final acaba siendo un domingo de esos que realmente me gustan a mí, esos que son como una especie de desayuno largo que se continúa durante todo el día... Y acabaré con mi madre acurrucada en el sofá pidiéndola que me siga tratando siempre como si fuera pequeña y que me cuente otra vez cuánto lloró cuando se murió James Dean.

Yo adoro a la gente muerta, aunque suene esquizofrénico y necrofílico. Los muertos son tan conclusos, tan quietos, con ese saber estar. Los vivos son torpes. Si tienes un ídolo vivo cualquier mañana puedes abrir el facebook y encontrarte con que ha hecho/dicho cualquier lamentable torpeza, o peor aún, tiene una novia que no eres tú. Entonces tienes que buscar su página, darle a "Ya no me gusta", buscar su twitter, darle a "Dejar de seguir" y soportar que cualquier persona te ponga la cara colorada hablando de la maldita torpeza... un lío, sinceramente.

Con los muertos ya está todo dicho y hecho. Te informas, te gusta y le conviertes en ídolo. Por no hablar de la cantidad de entradas que, sin ser consciente, te estás ahorrando con todos tus ídolos muertos.... y de la tranquilidad que da el no tener que estar pendiente de nuevos lanzamientos (salvo benditas excepciones). Y, sobre todo, te dan la capacidad de autoconvencerte de que si hubieses coincidido con ellos tú habrías sido su inseparable alma gemela.

Si Jesucristo estuviera vivo a mí no me gustaría, porque me crearía una tensión y una ansiedad horrible... y tener que seguirle por esos sitios llenos de arena que se te mete en las sandalias... puff, me está dando pereza sólo pensarlo, quita quita.

lunes, 24 de septiembre de 2012

Redes A-Sociales

Bonito cambio de look de nuestro blog :) me gusta.

Ya te lo he comentado alguna vez creo, pero últimamente las redes sociales las considero herramientas de asocialización. Como hoy, tengo 29 personas conectadas en Facebook y con ninguna de ellas quiero hablar. Aún así sigo actualizando la página por si acaso ocurriera un milagro y apareciera alguien con quién de verdad mereciera la pena hablar. Y me siento tonta. Por eso el 90% de las veces tengo el chat desactivado. No causa más que desilusiones ya sea porque te habla alguien que no quieres o porque quien quieres que te hable no está. Y muchas veces, ese alguien, no es nadie concreto, es simplemente otra persona, cercana o no, que dé el primer paso para escucharte o más bien leerte. Alguien que a través de la conexión y los cables sabe que necesitas hablar. Pues bien, eso no suele ocurrir, porque para bien o para mal, el ser humano ni es adivino ni es demasiado perceptivo. Así que, me dedico a meterme en Facebook cuando quiero estar sola. Y juego. Sí señora, juego. Cada mes a un nuevo juego. Sólo son excusas para no tener el chat encendido, porque claro si juegas y alguien te habla puedes perder puntos o cosas así.

Creo que me entiendes. Es más, estoy segura. Pasamos de incógnito por las redes sociales. Son para nosotras y no para el resto. Lo mismo pasa con Twitter. Suelo escribir para mí. No son comentarios que van dirigidos para informar al resto, sino que son palabras para dejar constancia de algo que a mí me ha parecido relevante conservar. Y en eso nos parecemos. Y nos entendemos. Sabemos cuándo un comentario va para ser compartido y comentamos, o cuándo en realidad va para la propia persona. Empiezo a odiar esta intimidad pública que nos forjamos. Y conforme sigo escribiendo me doy más cuenta. Y si siguiera mucho más, cerraría todo. Y quizás sería más feliz. Seguramente lo fuera, porque no me pondría triste si nadie se ha acordado de mí o no me agobiaría si alguien se ha acordado demasiado de mí.

Somos complicadas. Puede que seamos sociópatas. Puede que nos equivocásemos de época al nacer. Pero cada vez que abro la página de Facebook, me siento más asocial.

sábado, 22 de septiembre de 2012

Coleteros

Me he puesto a reflexionar y los coleteros son como algo muy prostituido. Pasan por la cabeza de mucha gente y cambian de dueño sin que te des cuenta. Además, se supone que son para llevar en el pelo y montón de gente lo lleva en la muñeca (yo incluída). Si hablasen podrían contar muchas cosas, así que me alegro de que no lo hagan.

Y esto se me ocurre a las 9am en una parada de bus, que hoy me voy a Soria. Hala, a la vuelta, entrada seria.

domingo, 2 de septiembre de 2012

Tonterías

Me sigue costando mucho encontrar dónde se pone una nueva entrada, ¡pero bueno!, aquí estoy. Acabo de ver el corto de presentación de la nueva colección de Davidelfín, que aún no lo había visto, amiga... es que últimamente estoy ocupada y todo. Es un ídolo, yo le quiero.

Me parece muy bien lo de la estética, es mi principal objetivo también. Una chica que hace tutoriales en youtube ha cambiado radicalmente en dos años y sin pasar por quirófano, así que yo me he hecho muy fans de eso. Y no me basta tampoco con la mía propia, me encantaría cambiar la de mi casa, de las calles, la de la gente que me rodea... a veces lo hago mentalmente, pero mi objetivo es hacerlo en la realidad. Algún objetivo hay que tener, ¿no?. Bueno, no, tampoco es necesario.

Y así acabé yo anoche a las tres de la mañana googleando cosas como "emigrar a Chile" "mejores lugares para emigrar" "cómo maquillar párpados caídos" y un largo etcétera. Es dramático. Todo iría mejor si no se hubiese cancelado mi boda en octubre con mi maridito del que estoy profundamente enamorada. Aunque, pensándolo bien, si él hubiese aceptado me parecería un tonto, porque hay que ser muy poco avispado para contraer matrimonio con un espécimen como yo... entonces ya no me gustaría él, porque no me gustan los tontos. Sí, suena contradictorio, hasta yo me he dado cuenta.

¿Te referías a él cuando dices que tenemos un lector? Espero que no, eso me haría sufrir mucha presión y dejaría de escribir entradas.

Dice mi hermana que es una pena todos los bosques que arden y yo pongo un gesto cariacontecido por pura inercia. Pero en el fondo me da igual, últimamente me he dado cuenta de que no me perturba el sueño el sufrimiento ajeno; bastante tengo con lo mío... ¿a que sí?.

Lo que sí me hizo sufrir es cuando mi globo querido que echaba un fino chorrito de agua se explotó, ahí, delante de mis narices. No aguantó más la vida y a los cinco minutos de su nacimiento decidió saltar del cubo y suicidarse, poniendo fin a su existencia que se estaba convirtiendo en una espiral sin retorno hacia el abismo. Fue muy triste. Pero ahí nos tenías a nosotras, la viva imagen de dos chicas simpáticas, alegres, a las que la vida les va bien y nada les asusta. Ahí nos tenías, con globos de agua de mil colores dispuestas a jugar y ser felices... no lo entiendo. Hay veces que no nos reconozco.

Ayer cuando te eché la mano y me presenté iba completamente en serio, los primeros minutos era como que no te conocía. Luego ya sí, en cuanto te tiraste un eructo pensé "esta es mi amiguita de siempre, nada ha cambiado". Bueno sí, ha cambiado la Susie, que ahora está despeinada. En mi pueblo había una puta que le decían "la Pelos" y siempre iba despeinada. Si un día vas a mi pueblo (Dios te libre) y te dicen "le paces a la pelos" (traducción: "te pareces a la Pelos") puede ser porque vas despeinada, porque llevas pinta de pilingui, porque vas exageradamente maquillada, porque eres muy marchosa... siempre te quedará esa duda.

Voy a poner una foto que le robé a no sé quién... te gustará.



martes, 28 de agosto de 2012

Majaradas

Sí hija, estoy con esa palabra desde ayer y creo que debemos compartir esto con el mundo, porque sé que hay alguien, aunque haya sido por casualidad que nos lee (o porque ha visto que lo tenemos puesto en twitter y puede sentirse de esa forma conectad@ a nosotras). 

Ando retocando las fotos también retocadas por ti, porque tenemos que rellenar un album entero de los de facebook, no es papel que es caro, con nuestras fotos que entren dentro de la calificación "Haciendo Majaradas" y eso se nos suele dar bien. Y mi experimento de reunir fotos que ya teniamos en facebook ha sido un fracaso.

La verdad, me encanta hacer esto amiga, y espero que mañana hagamos algunas, haciendo así como que estudiamos. Las hacemos con el móvil que le da a todo un toque más reto cool (pero sin Instagram, que eso es demasiado mainstream y no nos gusta).

Uy, parece que queda muy bien esta foto... ¡cómo me gusta! Y se me ha olvidado lo que te iba a contar, pero me da igual, porque quedamos muy bien. Lo renconozco, soy superficial y me encanta. Igual que busco una estética para mí, busco que otras personas la tengan. La belleza está en el interior, vale, pero también quiero belleza exterior. Sin la una la otra tampoco funciona. Quizás de ahí lo del maquillaje. ¡Ah! Voy con purpurina en los ojos, porque una amiga mía me ha dejado sombra de ojos con purpurina para ir a comprar el pan. Era un detalle que tenía que comentar y que sé que tú y Ona estariais orgullosas de mí, porque nos entendemos.

Hacía mucho que no retocaba fotos... ¡y qué bien me lo estoy pasando! Esto de cambiar la realidad para que se note que no es real es como que genial. Es como nuestra vida. Es crear un sueño bonito de algo que de otra forma podría dar mucha menos impresión. Debería hacerlo más a menudo. Creo que ahora lo retomaré. Así que querida, te dejo para seguir dándolo ese toque irreal a lo real ;)

lunes, 20 de agosto de 2012

Purpurina

Me gusta la palabra purpurina y la purpurina en general. Hace un par de noches, mi prima de 4 años y yo estuvimos hasta las dos de la madrugada hablando de purpurina, de sus tipos, sus usos y sus posibilidades.

Mi prima es muy genial, es una de las personas más geniales que conozco. Todas las mañanas se maquilla y se retoca varias veces a lo largo del día. No sale de casa si no lleva las uñas de los pies y de las manos perfectamente pintadas. Normalmente lleva tacones y su armario consiste en una veintena de disfraces que combina al azar. Otros días le apetece ir en paños menores, sin ningún tipo de restricción. Asegura que sabe todo lo que hay que saber sobre zombies (citando sus palabras) y el otro día me confesó que se va a morir pronto. Así, sin más. Dice que tiene amigos esqueleto, que ha dormido dos veces en una tumba con mantas y almohadas aportadas por otros esqueletos. Todas las semanas desentierra a su pájaro para ver si se le ve mucho o poco el espíritu.

Si antes de dormir le dices "dulces sueños" sueña con que es una princesa y se casa con Hércules. Si se te olvida, dice que pasa la noche entera llorando por pesadillas repletas de escenas dignas de las mejores películas de terror.

Tiene altos conocimientos de maquillaje, tendencias y combinación de colores. El otro día yendo al parque vio a un chico a caballo y ni corta ni perezosa le dijo "Oye, príncipe, con esas botas tan ridículas no salvarás a ninguna princesa". El muchacho no sabía si reir o si llorar. Yo me reí.

Es genial, sencillamente genial. La quiero tanto...

La otra tarde me dijo que necesitábamos tener una nueva actitud (¿de dónde sacará ese tipo de palabras?), así que voy a hacerla caso. Y tú me tienes que ayudar en esto... pero ya hablaremos de estas y otras majaradas que empiezan a acumularse demasiado en mi mente.

Creo que cuando nos veamos la conversación deberá empezar con una presentación... ¡somos ya casi desconocidas!. Qué poquísima vergüenza. Tienes que darme más detalles sobre esa fiesta; ¿es aquella a la que me negué a ir sin molestarme en ponerte una excusa? ¿o ha sido durante mi ausencia? ¿o hay algo que celebrar?.